

Crónica de una Gesta Inolvidable: Harry Potter y el Pergamino de Sofía
En los anales del Colegio, quedará grabada con letras de fuego la fecha del jueves 29 de mayo, día en que la realidad cedió ante la fantasía, y el mundo ordinario se vio atravesado por la magia. Ese día, en honor al Día del Estudiante, se alzó una representación colosal: Harry Potter y el Pergamino de Sofía, una epopeya teatral que unió generaciones bajo el estandarte del asombro.

El gimnasio del Colegio fue transformado por sortilegios invisibles en un fragmento del castillo de Hogwarts. Allí, entre columnas de humo y cirios flotantes, se tejió una historia jamás contada: un nuevo capítulo en la saga del joven mago. Esta vez, el destino de la celebración dependía de encontrar al responsable del robo de un objeto legendario —el enigmático Pergamino de Sofía— en cuyo interior se contenía el secreto que permitiría que el Día del Estudiante se llevara a cabo. Sin él… todo se perdería.
El llamado fue respondido por un elenco de héroes y villanos surgidos no de la ficción, sino de las propias filas de nuestra comunidad educativa. Profesores, asistentes, profesionales y directivos abandonaron sus roles cotidianos para encarnar a los personajes de la saga con una entrega digna de Gryffindor: Harry Potter, Dobby, Alastor Moody, Minerva McGonagall, Dolores Umbridge, Luna Lovegood, Hagrid, Voldemort, Dumbledore, Severus Snape y Hermione Granger tomaron cuerpo y voz para librar una batalla contra el olvido, la rutina y la falta de imaginación.
La mente maestra tras esta odisea fue la profesora Sra. Paulina Araya, quien tejió la trama como una auténtica hechicera de las letras y la escena. Su dirección infundió a la obra un ritmo trepidante, donde cada palabra y cada gesto eran parte de un encantamiento mayor: el de la emoción compartida.
Los estudiantes, verdaderos destinatarios de esta aventura, no fueron meros espectadores. Desde el primer instante, respondieron con vítores, asombro y ojos brillantes. Fueron parte de ese mundo mágico, donde los vestuarios, la escenografía —con varitas centelleantes, libros que susurraban y artefactos que desafiaban la lógica— hicieron temblar las fronteras entre lo real y lo soñado.
Esta representación fue más que un acto teatral: fue una gesta colectiva. Un acto de amor pedagógico, de juego, de entrega y de fe en la fantasía como forma de resistencia y homenaje. A quienes empuñaron la vara del personaje, a quienes tras bambalinas movieron los hilos de esta magia, y a quienes se dejaron hechizar: gracias eternas.
Elenco Principal de la Orden Mágica del Colegio:
Harry Potter: Matías Araya
Dobby: Daniela Madrid
Sybill Trelawney: Alejandra Gálvez
Pomona Sprout: Carmen Andurandeguy
Alastor Moody: Fernando Valdivia
Minerva McGonagall: Becy Alarcón
Dolores Umbridge: Claudia Aravena
Luna Lovegood: María Elisa Zamorano
Rubeus Hagrid: Iván Balbontín
Voldemort: Ariel Torres
Albus Dumbledore: P. Humberto Palma
Severus Snape: Juan Pablo Osorio
Draco Malfoy: Victor Navarrete
Lucius Malfoy: Manuel Cabezas
Bellatrix Lestrange: Nataly Plaza
Hermione Granger: Marlene Osorio
Estudiantes de Hogwarts y mortífagos: Docentes y asistentes de la educación
Creación y Dirección: Paulina Araya
Y así, como diría Dumbledore: «La felicidad puede hallarse hasta en los más oscuros momentos, si somos capaces de usar bien la luz.»
En gratitud, compartimos el álbum fotográfico: https://flic.kr/s/aHBqjCgBmt
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